Dolor de cabeza
Dolor de cabeza primario
Los dolores de cabeza primarios1 se presentan de forma independiente y no están causados por otra enfermedad. Es incierto lo que coloca en movimiento al proceso de un dolor de cabeza primario.
Una cascada de eventos que afectan los vasos sanguíneos y los nervios dentro y fuera de la cabeza causa que señales de dolor se envíen al cerebro. Las sustancias químicas cerebrales llamadas neurotransmisores están involucradas en crear el dolor de cabeza, al igual que los cambios en la actividad de la célula nerviosa (llamada depresión cortical propagada).
La migraña, el dolor de cabeza en racimo y el dolor de cabeza tensional son los tipos más comunes de dolor de cabeza primario.
Dolor de cabeza secundario
Los dolores de cabeza secundarios son síntomas de otro trastorno de salud que causa que las terminaciones nerviosas sensibles al dolor se compriman, se estiren o se empujen fuera de lugar.
Pueden ser el resultado de:
- afecciones subyacentes
- fiebre
- infección (meningitis, encefalitis)
- uso de medicamentos en exceso
- estrés o conflicto emocional
- presión arterial alta (hipertensión arterial)
- trastornos psiquiátricos
- lesión o traumatismo craneano
- accidente cerebrovascular
- tumores
- trastornos nerviosos (particularmente neuralgia del trigémino, una afección con dolor crónico que afecta típicamente a un nervio principal en un lado de la mandíbula o la mejilla).
Los dolores de cabeza pueden variar en frecuencia y en intensidad del dolor.
Algunos individuos pueden tener dolores de cabeza una o dos veces al año mientras otros pueden tenerlas más de 15 días por mes.Algunos dolores de cabeza pueden reaparecer o durar durante varias semanas por vez. El dolor puede variar desde leve a incapacitante y puede estar acompañado de síntomas como náuseas o sensibilidad aumentada a los ruidos y la luz, dependiendo del tipo de dolor de cabeza.
Por qué duele la cabeza?
La información sobre tacto, dolor, temperatura y vibración en la cabeza y el cuello se envía al cerebro a través del nervio trigémino, uno de los 12 pares de nervios craneanos que comienzan en la base del cerebro.
El nervio tiene tres ramas que conducen sensaciones del cuero cabelludo, los vasos sanguíneos dentro y fuera del cráneo, el revestimiento alrededor del cerebro (las meninges), y la cara, boca, el cuello, las orejas, los ojos y la garganta.
El tejido cerebral en sí carece de nervios sensibles al dolor y no siente dolor.
Los dolores de cabeza aparecen cuando terminaciones nerviosas sensibles al dolor llamadas nociceptores reaccionan a los desencadenantes del dolor de cabeza (como el estrés, ciertos alimentos u olores o el uso de medicamentos) y envían mensajes a través del nervio trigémino hacia el tálamo, la "estación de relevo" del cerebro para la sensación dolorosa de todo el cuerpo.
El tálamo controla la sensibilidad a la luz y el ruido del cuerpo y envía mensajes a partes del cerebro que controlan la conciencia del dolor y la respuesta emocional al mismo.
Otras partes del cerebro también pueden ser parte del proceso, causando náuseas, vómitos, diarrea, dificultad para concentrarse, y otros síntomas neurológicos.
Cuándo ver a un médico?
No todo dolor de cabeza requiere la atención de un médico. Sin embargo el dolor de cabeza puede señalar un trastorno más serio que requiere atención médica inmediata.
Inmediatamente llame o vea a un médico si usted o alguien con quien esté tiene alguno de estos síntomas:
- Dolor de cabeza intenso y repentino que puede estar acompañado por rigidez del cuello.
- Dolor de cabeza intenso acompañado por fiebre, náuseas o vómitos que no está relacionado con otra enfermedad.
- “Primer” o “peor” dolor de cabeza, a menudo acompañado de confusión, debilidad, visión doble, o pérdida del conocimiento.
- Dolor de cabeza que empeora en días o semanas o cuyo patrón o conducta ha cambiado.
- Dolor de cabeza recurrente en los niños.
- Dolor de cabeza posterior a una lesión craneana.
- Dolor de cabeza y pérdida de la sensación o debilidad en cualquier parte del cuerpo, que podría ser un signo de accidente cerebrovascular.
- Dolor de cabeza asociado con convulsiones.
- Dolor de cabeza asociado con dificultad para respirar.
- Dos o más dolores de cabeza por semana.
- Dolor de cabeza persistente en alguien que no ha tenido antes dolores de cabeza, particularmente en alguien mayor de 50 años.
- Nuevos dolores de cabeza en alguien con antecedentes de cáncer o VIH/SIDA.