Alimentación de la madre durante el periodo de lactancia
Los requerimientos nutricionales de la mujer que amamanta son mayores, incluso en comparación a los que hay en la etapa de embarazo.
Esto no quiere decir que se recomienda consumir gran cantidad de alimentos, ya que parte de estas mayores demandas de energía y nutrientes, producto del costo que tiene para el cuerpo el producir la leche, se pueden obtener del peso o depósitos acumulados durante el embarazo.
En la producción de leche materna, se invierten aproximadamente 800 calorías por litro, además del hecho que la madre también aporta los nutrientes que contiene la leche. Por estas razones es que se considera de gran importancia vigilar la alimentación de la madre en periodo de lactancia, ya que podría representar un riesgo para su estado nutricional.
El consumo de alimentos adicional que se debe dar en la dieta de una mujer amamantando, va a depender de su peso y por lo tanto de la cantidad de reservas que tenga, así como de la actividad física o ejercicio que realice. Si la madre tiene un índice de masa corporal normal (Ver cuadro), la necesidad de energía adicional es de unas 500 calorías y 15 gramos de proteína por día. Esta cantidad podría ser excesiva si la mujer tiene sobrepeso u obesidad, o insuficiente si tiene bajo peso.
Se debe tomar en cuenta que no solo la cantidad de alimentos es importante, sino también la calidad de estos, ya que los requerimientos de la mayoría de vitaminas y minerales están aumentados entre un 25% a un 50%.
A continuación se muestra un ejemplo de dos meriendas, que en conjunto suman aproximadamente 500 calorías.
Merienda |
Ejemplos |
Recetas |
De la mañana |
Batido de banano con yogurt natural y granola |
Batir un banano pequeño con 1 vaso (250 ml) de yogurt líquido natural y ¼ de taza de granola. |
De la tarde |
Pan de pita integral con jamón y queso |
Un pan de pita integral pequeño (4 pulgadas de diámetro) con una tajada de jamón bajo en grasa y 30 gramos de queso fresco. |
Uno de los nutrientes críticos que debe estar presente en la alimentación durante el periodo de lactancia es el omega-3, que al ser transferido desde la madre hacia su hijo, cumple un papel importante en el desarrollo del cerebro y de la visión en las primeras etapas de la vida. La síntesis de este ácido graso por parte del cuerpo es limitada, por lo que la principal fuente proviene de los alimentos.
Uno de los beneficios del omega-3 para la madre, es que se ha visto que las mujeres con adecuados niveles de este ácido graso, tienen menores índices de desarrollar depresión posparto.
Los alimentos fuentes de omega-3 son los pescados, en especial los de aguas frías. Se recomienda consumir 12 onzas (aproximadamente 360 gramos) de pescado a la semana, como por ejemplo salmón, camarones, atún, cangrejo, trucha, bagre, abadejo y vieiras.
No obstante, se debe tener cuidado con otros tipos de pescado que pueden contener contaminantes como mercurio, el cual es dañino tanto para la madre como para su hijo. Entre estos se encuentran el tiburón, el pez espada y la caballa gigante y blanquillo.
También existen suplementos de este nutriente, pero es importante recalcar que se debe revisar junto con el médico y nutricionista cuánto se está ingiriendo en total.
Ingesta de líquidos
La ingesta de líquidos debe ser de 8 vasos de 250 ml diarios, los cuales en su mayoría deben provenir de agua, aunque también pueden ser de leche con bajo contenido de grasas, jugos de fruta naturales, café (máximo 2 tazas) o té. La ingesta de alcohol durante la lactancia afecta el sabor de la leche materna y reduce significativamente su volumen.
La Liga Internacional de la Leche ha descrito que no es necesario consumir algún alimento específico durante el periodo de lactancia, ya que lo que determina y asegura la producción de leche es principalmente la succión del bebé. Por lo tanto, entre más se amamanta, por mayor tiempo se mantiene la producción de leche.
Otras recomendaciones:
- Tener una dieta variada, ya que con esto se expone al niño desde edades tempranas a diferentes sabores a través de la leche materna.
- Consumir 4 porciones al día de lácteos para cumplir el requerimiento de calcio. Una porción es equivalente a 250 ml de leche o yogurt, o 30 gramos (del tamaño de una caja de fósforos) de queso. Se deben preferir de tipo semidescremados o descremados.
- Comer 3 porciones de frutas (ej: 1 naranja, 8 fresas medianas, ½ taza de piña) y 2 de vegetales (1/2 taza de vegetales al vapor, 1 taza de ensalada verde de repollo morado con tomate)
- Recuerde incluir en su dieta diaria por lo menos ½ taza de leguminosas (lentejas, garbanzos, frijoles o porotos, arvejas)
- Evitar el consumo de alimentos altos en grasa como los embutidos y las frituras.
Clasificación de la Organización Mundial de la Salud (OMS) del estado nutricional según el Índice de Masa Corporal (IMC)
Clasificación |
IMC (peso en kg / talla al cuadrado m2) |
Bajo Peso |
Menos de 18,5 |
Normal |
Entre 18,5- 24,99 |
Sobrepeso |
25 – 29,99 |
Obesidad |
Mayor o igual a 30 |
Artículos relacionados:
-
Lactancia Materna… un regalo para toda la vida
-
Impacto de la Lactancia Materna en el Desarrollo Intelectual de los Niños
-
Por Qué es Importante Dar de Mamar?
-
Alimentación de las Madres durante el Periodo de Lactancia
-
Beneficios de la Lactancia Materna
-
Características de la Leche Materna
.
Autor: Daniela Cordero
Actualizado: 28 de agosto, 2018