Cáncer de testículo
El cáncer de testículo es una enfermedad en la cual se forman células malignas (cancerosas) dentro del tejido de uno o ambos testículos. El cáncer de testículo es el cáncer más común en los hombres de 20 a 35 años de edad.
Los testículos son 2 glándulas con forma ovalada que se ubican dentro del escroto (la bolsa de piel que se encuentra directamente debajo del pene).
Los testículos se sostienen dentro del escroto mediante el cordón espermático, que también contiene los conductos deferentes y los vasos y nervios de los testículos.
Los testículos son las glándulas sexuales del hombre, entre sus funciones se encuentran la producción de testosterona y esperma.
Las células germinales en los testículos producen espermatozoides inmaduros que viajan a través de una red de túbulos (tubos minúsculos) y tubos más grandes en el epidídimo (un tubo con forma de espiral largo que se encuentra junto a los testículos), donde el esperma madura y se almacena.
Casi todos los tipos de cáncer de testículo comienzan en las células germinales. Los dos tipos más comunes de tumores de células germinales de testículo son:
- Los seminomas, que representan alrededor del 40-45% de todos los cánceres testiculares de células germinales
- Los no seminomas, que representan alrededor del 40-45% de todos los cánceres testiculares de células germinales
Estos dos tipos de cáncer crecen y se diseminan de manera diferente y se tratan de manera diferente. Los tumores no seminomatosos tienden a crecer y diseminarse más rápidamente que los seminomas.
Los seminomas son más sensibles a la radiación. Un tumor testicular que contiene células tanto seminomas y no seminomatosas es tratado como un no seminoma.
Los seminomas y no seminomas tienden a responder bien a la quimioterapia, un tratamiento que utiliza medicamentos para destruir células cancerosas.
Los tipos menos comunes de cáncer testicular incluyen:
- Los tumores de células de Leydig, que representan en torno a un 1-3% de los casos
- Los tumores de células de Sertoli, que representan alrededor del 1% de los casos
- Linfoma, lo que representa alrededor del 4% de los casos
Frecuencia del cáncer de testículo
El cáncer testicular es relativamente poco común, representando sólo el 1% de todos los cánceres que se presentan en los hombres.
El cáncer testicular es poco común en comparación con otros tipos de cáncer, ya que tiende a afectar a los hombres más jóvenes. Como resultado, aunque relativamente poco frecuente en general, el cáncer testicular es el tipo más común de cáncer que afecta a los hombres entre las edades de 15 y 49 años
Factores de riesgo de cáncer testicular.
Cualquier cosa que aumente la posibilidad de contraer una enfermedad se llama factor de riesgo. Tener un factor de riesgo no significa que usted vaya a desarrollar cáncer; y no tener factores de riesgo tampoco significa que usted no vaya a desarrollar cáncer. Hable con su médico si usted cree que puede estar en riesgo.
Los factores de riesgo para cáncer testicular incluyen:
- Antecedente de haber tenido un testículo no descendido.
- Antecedente de haber tenido un desarrollo anormal de los testículos.
- Tener antecedente personal de cáncer de testículo.
- Tener antecedentes familiares de cáncer de testículo (especialmente padre o hermano).
- Ser blanco.
Signos y síntomas
Estos y otros signos y síntomas pueden ser causados por el cáncer testicular o por otras condiciones. Consulte con su médico si usted tiene cualquiera de los siguientes:
- Un bulto que no duele o inflamación en cualquiera de los testículos.
- Un cambio en cómo se siente el testículo.
- Un dolor sordo en la parte baja del abdomen o la ingle.
- Una repentina acumulación de líquido en el escroto.
- Dolor o malestar en un testículo o en el escroto.
Pruebas que examinan los testículos y pruebas de sangre que se utilizan para detectar y diagnosticar el cáncer de testículo.
Las siguientes pruebas y procedimientos se pueden utilizar para el diagnóstico:
- Examen físico y antecedentes: examen del cuerpo para verificar los signos generales de salud, incluido el control de signos de enfermedad, como masas o cualquier otra cosa que parezca inusual. Los testículos se examinarán para comprobar si hay bultos, hinchazón o dolor. También se anotan los antecedentes de los hábitos de salud del paciente y las enfermedades y tratamientos anteriores.
- Ecografía (ultrasonido): el ultrasonido es un procedimiento en el cual se emiten ondas sonoras de alta energía (ultrasonido) que rebotan en tejidos u órganos internos y se crean ecos. Los ecos forman una imagen de los tejidos corporales que se llama sonograma o ultrasonido.
- Prueba sérica de marcadores tumorales: procedimiento en el cual se examina una muestra de sangre para medir las cantidades de ciertas sustancias liberadas en la sangre por los órganos, los tejidos o las células tumorales en el cuerpo. Ciertas sustancias se relacionan con tipos específicos de cáncer cuando se encuentran en concentraciones altas en la sangre. Estas se llaman marcadores tumorales. Los siguientes marcadores tumorales se utilizan para detectar el cáncer testicular:
Los índices de marcadores tumorales se miden antes de la orquiectomía inguinal y la biopsia, para ayudar a diagnosticar el cáncer de testículo.
- Orquiectomía inguinal: procedimiento para extirpar todo el testículo a través de una incisión en la ingle. El cirujano no corta a través del escroto en el testículo para extraer la muestra del tejido para la biopsia, ya que si hay cáncer, este procedimiento podría causar que se extienda en el escroto y los ganglios linfáticos. Es importante elegir un cirujano que tenga experiencia con este tipo de cirugía. Si se encuentra cáncer, el tipo de célula (seminoma o no seminoma) se determina con el fin de ayudar a planificar el tratamiento.
- Biopsia: Una muestra de tejido del testículo se examina bajo un microscopio para verificar si hay células cancerosas.
Tratamiento
El pronóstico (posibilidad de recuperación) y las opciones de tratamiento dependen de lo siguiente:
- Estadio del cáncer (si se encuentra en o cerca del testículo o se ha diseminado a otros lugares del cuerpo, y los niveles en sangre de marcadores tumorales AFP, β-hCG y LDH).
- Tipo de cáncer.
- Tamaño del tumor.
- Número y tamaño de los ganglios linfáticos retroperitoneales.
Cirugía
La primera opción de tratamiento para todos los casos de cáncer testicular, cualquiera que sea la etapa, es eliminar quirúrgicamente el testículo afectado (una orquiectomía).
En los casos de seminomas en estadío I, después de que el testículo se ha eliminado, se administra una sola dosis de la quimioterapia para ayudar a prevenir que el cáncer regrese. A veces se recomienda un ciclo corto de radioterapia.
En el no seminomas estadío I , el seguimiento estrecho del caso puede ser recomendado, o un ciclo corto de quimioterapia con una combinación de diferentes medicamentos.
En los casos de estadío II y III de cáncer, se administran de tres a cuatro ciclos de quimioterapia utilizando una combinación de diferentes medicamentos. A veces puede ser necesaria la cirugía adicional después de la quimioterapia para eliminar cualquier ganglios linfáticos afectados.
Un plan de tratamiento similar se utiliza para tratar el cáncer en el estadío IV. Cirugía adicional también puede ser necesaria para eliminar metástasis del tumor en otras partes del cuerpo, dependiendo de la extensión de la propagación del cáncer.
El tratamiento para el cáncer testicular puede causar infertilidad.
Ciertos tratamientos para el cáncer testicular pueden causar infertilidad que puede ser permanente. Los pacientes que deseen tener hijos deben valorar la posibilidad de utilizar un banco de esperma antes de someterse a tratamiento. El banco de esperma se encarga del proceso de congelación y almacenamiento de esperma para su uso posterior.
Geosalud 10 noviembre 2014
Fuente
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Cancer Institute (http://www.cancer.gov)